Autor: Luzy
Pareja: Jaejoong y -
Genero: Hetero, Angst, Lemon, mafia...
Extencion: -
Nota: Podrán darse cuenta en los primeros capítulos tendrán un ligero parecido con la película de Dating on earth, en donde Jaejoong estará envuelto en la mafia, les puedo decir que tendrá mucho angst y drama... solo espero no matar a alguien en algún futuro(?)' no se sabe... espero que les guste este segundo serial hétero. Los números de capítulos variaran según dependiendo del rating :3 ya saben que aquí su servidora es espontanea y puede haber capitulo extras y así.. según a como ustedes pidan. Asi que de una eterna espera a leer gogo~
~Prologo~
Capitulo 1
Un sonido repetitivo me despertó, con una pereza sorprendente trataba de abrir mis parpados, aquel sonido seguía insistente, busque torpemente aquel aparato y aplaste el botón que lo hacía callar, en un suspiro resignado me quede por esos 5 minutos extras que todos pedían, con el temor de quedarme dormida decidí despertar para dirigirme al baño para alistarme, bajar a desayunar y cumplir otro día de escuela.
Me di el último vistazo hacia mi espejo para arreglar cualquier imperfección en mi uniforme y a mi cabello, tome la mochila guardando lo que había sacado el día anterior y así dirigirme a la cocina por un vaso de jugo. El señor que me había dado hospitalidad en su casa me dio los buenos días y yo hice lo mismo, tomo de la misma manera un vaso de jugo y nos montamos en su auto para que me dejara a la escuela. Me despedí dándole las gracias para entrar al fin a las clases, me encontré con otras compañeras que llegaban al mismo tiempo, debo decir que fue un poco difícil acoplarme con las nuevas personas y más en un país extranjero; yo estaba de intercambio, así que rogué por no recibir bullyng pero no fue así, por suerte pude entablar algunas amistades en estos dos años.
Era otro comienzo de clases común, casi al comienzo de clase el director interrumpió, dijo que tenia un aviso.
- Alumnos, la razón por la que estoy aquí es porque tendrán un nuevo compañero de clase — todos se quedaron en silencio esperando al nuevo integrante, el director giro su cabeza hacia la puerta sugiriendo que entrara — su nombre es Kim Jaejoong, espero que lo traten bien, él estará con ustedes en este último año de escuela.
Todos comenzaron a murmurar, yo mire al chico con curiosidad que parecía no estar tímido si no despreocupado, cargando su mochila con su brazo doblado y su mochila cayendo a su espalda. La maestra le dio la bienvenida y le sugirió que tomara asiento. Camino despreocupado por las filas y se dejo caer, jugando su lengua adentro de su boca como si eso no fuera nuevo para él.
La clase avanzo normal hasta que dio el timbre por terminada la primera clase, con algunos bostezo silenciosos le dimos la despedida a la maestra, todos comenzaron hablar, las chicas con las convivía se acercaron a mí y el tema obviamente fue por el nuevo miembro de la clase.
- Ese Kim Jaejoong es muy guapo ¿no creen? — asentimos, era cierto
- pero parece ser un chico de problemas — menciono Min ha
- eso pienso también, no estaba avergonzado o algo así, simplemente camino y se dejo caer como si nada… es más, ni siquiera hizo algún apunte de la clase — estuvieron de acuerdo conmigo — si este fue el comienzo, ese chico no va a durar mucho en esta escuela tampoco.
Era la hora del almuerzo, revisaba el menú tratando de tomar lo más agradable, seguidas por mis amigas para irnos a sentar, comimos tranquilamente y decidimos salir para prepararnos la siguiente clase que era educación física, nos cambiamos con el uniforme adecuado y nos dirigimos al gimnasio, debido a que no comenzaba la clase aun los chicos comenzaron a jugar un poco de baloncesto, mientras nosotras solo éramos afición. El maestro al fin apareció y todos nos formamos debidamente, comenzó a pasar lista.
- Tengo entendido que un chico nuevo entro, ¿Dónde está él? — todos se voltearon a ver, al parecer nadie sabia
- yo lo vi deambulando por la escuela pero no sé donde se encuentra ahora — expreso uno
- a lo mejor está perdido o simplemente se dio el lujo de no asistir por el primer día
- bueno, por hoy lo pasare por alto, espero que para la siguiente clase se presente o si alguno de ustedes lo ven le dicen que más vale que asista por que estará en problemas.
Y como era de esperarse Kim Jaejoong no se volvió a presentar a ninguna clase desde la primera. Al fin las clases acabaron, con cara de “ya no quiero” salimos todos, me despedí de Min ha y Tiffany, con una sonrisa aflojerada, camine arrastrando los pies hasta llegar la primera parada del auto bus, ya estaba oscuro, me senté y comencé a zapatear para matar el tiempo, mire en mi celular la hora y lo guarde, tome de mi cartera para sacar el dinero para pagar el camión, sin percatarme una persona se sentó a un lado de mi, seguí rebuscando las monedas cuando de pronto esa persona se acerco y tomo mi monedero, reaccione apretándolo, comenzamos a forcejar, aquella persona jalaba y yo tiraba igual de ella, al ver que no aflojaba con una de sus manos tomo mi cara y me empujo hacia atrás, sentí que casi me dislocaba pero seguía prendida como perro pitbull a mi cartera hasta que como última opción y no lo vi venir me empujo con su planta del pie a mi estomago haciendo que cayera con fuerza al pavimento, me golpee muy fuerte la cabeza que lleve repentinamente mis manos a ella moviéndome del dolor, escuche como un claxon pito y una luz me ilumino, abrí mis ojos cegándome por la luz dándome cuenta que un coche venia directo y rápido acercándose, el sonido chillante de las llantas de rapar me aturdió, cerré mis ojos esperando el golpe pero fui tironeada moviéndome el mundo y volviéndome a quejar por el fuerte tirón.
Seguía aturdida, respire varias veces pues había dejado de hacerlo, al abrir de nuevo mis ojos sentí esa punzada en la cabeza y el dolor en el estomago por el golpe. Escuche como una persona se acercaba y su voz estaba alterada preguntándome si estaba bien, estaba en brazos de no se quien, me separe un poco asintiendo con aquella persona, que ofreció llevarme al hospital pero solo negué, pose mi vista en la otra persona y me lleve una sorpresa. Era .. Kim Jaejoong. Trate de articular algo pero ese dolor seguía rondándome en la cabeza, tome del brazo de él y lo mire.
- Jaejoong… tu… ¿tu me salvaste? — me miro con aquellos ojos oscuros y grandes, me voltio la cara
- deberías tener más cuidado a la otra — expreso como un regaño. Aquella persona me jalo hasta su coche, estaba empeñada con llevarme a el hospital, sin remedio subí. Busque a Jaejoong, él seguía ahí parado con ese semblante serio hasta desaparecer de mi vista al marchar el coche.
Camino al hospital, aquella mujer me pregunto cómo había terminado en el piso, así que le conté todo lo sucedido. Llegamos al hospital y minutos de espera fui atendida, todos me decían que había tenido suerte, eso mismo creía, entre tiempos me imaginaba mi cadáver partido por las llantas, eso no le hacía nada bien a mi estado de ánimo. Avisaron a mi tutor, por ende el doctor me reviso, tenía unos moretones en el estomago y algunos raspones en el codo contando el dolor aun punzando en mi cabeza para ya bajo, de seguro no dormiría ni por el dolor, ni por lo sucedido. Con la respiración acelerada el señor Jin llego, me reviso de pies a cabeza para abrazarme, yo solo le dije que quería ir a casa y así fue, en el camino por segunda vez conté los hechos.
- Tenemos que avisarle a tus padres — yo me negué, no quería causar angustia, sabía que mi madre estaba angustiada de seguro por el simple hecho de estar lejos de casa y mas con eso — tengo que hacerlo, es mi deber como tu tutor… no debo permitir que te pasen este tipo de cosas.
- pero no fue su culpa, ni usted ni yo teníamos idea de que esto pasaría. Le pido por favor que no le diga nada de esto, si le dice… de seguro mi madre ya no va a poder dormir pensando lo peor cada día y mas suponiendo que este país es más seguro que él mío — el señor Jin seguía sin estar de acuerdo, le pedí que al menos dejara pasar algunos días, ya después que me sintiera mejor y que pudiera hablar con ella por si algo tratara de hacer; como devolverme a donde vivía.
Camino al hospital, aquella mujer me pregunto cómo había terminado en el piso, así que le conté todo lo sucedido. Llegamos al hospital y minutos de espera fui atendida, todos me decían que había tenido suerte, eso mismo creía, entre tiempos me imaginaba mi cadáver partido por las llantas, eso no le hacía nada bien a mi estado de ánimo. Avisaron a mi tutor, por ende el doctor me reviso, tenía unos moretones en el estomago y algunos raspones en el codo contando el dolor aun punzando en mi cabeza para ya bajo, de seguro no dormiría ni por el dolor, ni por lo sucedido. Con la respiración acelerada el señor Jin llego, me reviso de pies a cabeza para abrazarme, yo solo le dije que quería ir a casa y así fue, en el camino por segunda vez conté los hechos.
- Tenemos que avisarle a tus padres — yo me negué, no quería causar angustia, sabía que mi madre estaba angustiada de seguro por el simple hecho de estar lejos de casa y mas con eso — tengo que hacerlo, es mi deber como tu tutor… no debo permitir que te pasen este tipo de cosas.
- pero no fue su culpa, ni usted ni yo teníamos idea de que esto pasaría. Le pido por favor que no le diga nada de esto, si le dice… de seguro mi madre ya no va a poder dormir pensando lo peor cada día y mas suponiendo que este país es más seguro que él mío — el señor Jin seguía sin estar de acuerdo, le pedí que al menos dejara pasar algunos días, ya después que me sintiera mejor y que pudiera hablar con ella por si algo tratara de hacer; como devolverme a donde vivía.
Daba vueltas en la cama gimiendo un poco por la dolencia, pero aun así no podía conciliar el sueño, por mi mente pasaban tantas cosas, solo quería que mi cabeza se callara para poder dormir, pero en mi mente solo aparecía esa escena y Jaejoong, pensando ¿Cómo es que apareció ahí? ¿estaba siguiéndome? ¿fue una casualidad? Eran tantas cosas, solo que no podía quitarme su rostro de mi mente, sus ojos; grandes y oscuros, no se extinguía su pupila de la cornea, también recordando esos bultos rosados… un poco magullados pero contrastaban con su piel blanca, con esa imagen logre conciliar el sueño.
Era otro amanecer, con un poco de más pereza que el día anterior me quede mirando hacia el techo, dando gracias de que otro día más podía abrir mis ojos, con movimientos robotizados me dirigí al baño para ducharme, me tomo mas tiempo pero al final estaba abajo tomando el jugo diario, el señor Jin al verme se quedo ahí viéndome para después hablar.
- No deberías de asistir a la escuela — yo negué
- es mi último año, no quiero atrasarme — excuse
- con un día que no vayas al colegio no te atrasaras
- no quiero que mis compañeras se extrañen con mi ausencia y tenga que contarles, prefiero que todo esto solo quede entre nosotros — el señor Jin no insistió así que me llevo a la escuela, corroborando si en verdad estaba apta para asistir, así que con esfuerzo le di entender que estaba bien aunque me seguían doliendo los golpes. Pero más que no perder clases, quería verlo a él… quería darle las gracias, tenía la esperanza de poder acercarme.
Era otro amanecer, con un poco de más pereza que el día anterior me quede mirando hacia el techo, dando gracias de que otro día más podía abrir mis ojos, con movimientos robotizados me dirigí al baño para ducharme, me tomo mas tiempo pero al final estaba abajo tomando el jugo diario, el señor Jin al verme se quedo ahí viéndome para después hablar.
- No deberías de asistir a la escuela — yo negué
- es mi último año, no quiero atrasarme — excuse
- con un día que no vayas al colegio no te atrasaras
- no quiero que mis compañeras se extrañen con mi ausencia y tenga que contarles, prefiero que todo esto solo quede entre nosotros — el señor Jin no insistió así que me llevo a la escuela, corroborando si en verdad estaba apta para asistir, así que con esfuerzo le di entender que estaba bien aunque me seguían doliendo los golpes. Pero más que no perder clases, quería verlo a él… quería darle las gracias, tenía la esperanza de poder acercarme.
Estaba de nuevo frente a la escuela, como ultima sugerencia el señor Jin me pidió que le avisara si me sentía mal, así que le asegure que así seria, pero antes de bajarme me ofreció de su dinero para el almuerzo de hoy, con vergüenza tome el dinero y le agradecí. Al llegar al salón de clases, espere pacientemente que por esa puerta entrara él, pero nunca paso, ni la clase siguiente ni todas las clases. Min ha y Tiffany no sospechaban nada, eso me hacía sentir algo tranquila aunque mi forma de actuar era extraño, tenia limites de movimiento, así que trataba de verme lo más natural. Por suerte este día no había clases de física, el día transcurrió tranquilo, cheque la hora así que era momento para tomar la pastilla, pedí permiso para salir de clase y así poder tragarme la pastilla, busque algún bebedero cercano. Cuando había terminado de hacerlo me dispuse a regresar a clase pero por el final del pasillo vi a alguien que iba subiendo las escaleras, le reconocí así que un poco indecisa decidí seguirlo. Con pasos sigilosos lo seguí hasta la azotea, la puerta se cerro y yo me quede ahí, pensando si debía hacer presencia o no, bailaban mis dedos por la puerta debatiéndome, con cuidado abrí la puerta mirando por la rendija si se veía él así que abrí un poco mas hasta que lo pude ver, estaba de espaldas, de pronto fue acercándose a la acera y se sentó, eche un vistazo hacia atrás por si alguien venia pero no, así que tome valor y decidí aparecerme.
Hice una parada mentalizando lo que le diría, pero preparándome para su reacción, esperaba que no se asustara y se cayera al precipicio, pero el olor a tabaco me despejo de mis pensamientos. “Es por eso que ha subido hasta acá” pensé, quise arrepentirme pero ya estaba ahí y él ya se había dado cuenta.
-Ja-Jaejoong — le llame titubeante, su rostro se giro dándome su perfil — yo… yo quería… quiero darte las gracias por lo de anoche — él no contesto, y se giro nuevamente — de verdad gracias… s-si algún día se te ofrece algo.. yo.. — en ese momento Jaejoong se levanto tiro le cigarro apagándolo, baje mi mirada, sus pasos fueron acercándose hasta pararse al lado mío, pero no dijo nada y se fue.
Se lee interesante.
ResponderEliminar